Aries (en las relaciones)

-Aries con Aries. La unión de dos Aries puede llevar a extremos insospechados. Juntos, pueden cometer todo tipo de errores, pero también gran cantidad de aciertos. Si te sientes locamente atraído/a por un Aries, ten cuidado con tu aspecto físico porque te mirará con lupa, pues los nativos de este signo están sumamente preocupados por su imagen y su presencia, llegando a ser un poco vanidosos. Aunque este signo pueda tener miedo a las cosas más insignificantes, la verdad es que Marte, el planeta que lo rige, le otorga toda la gana y el coraje que necesita para afrontar las luchas cotidianas. Cuando dos Aries chocan, pueden saltar chispas y esto, tarde o temprano, sucederá porque la convivencia diaria lleva a pequeños roces que la doble influencia de Marte soluciona con una enorme batalla. Pero dicen que lo mejor es la reconciliación. En la mayoría de las ocasiones entre vosotros reinará la armonía y el amor, y cuando las crisis llegan será porque los dos queréis satisfacer vuestras respectivas necesidades.

-Aries con Tauro. Fuerza y paciencia son las principales virtudes del carácter de Tauro, por lo que necesitará la mayor dosis de ellas para poder aguantar tus cambiantes estados de ánimo, tus locuras momentáneas y tus aires autoritarios que te asaltan de vez en cuando. Aunque el sexo puede ser un hilo muy débil que amarre vuestra relación, por algo hay que empezar, pero si queréis que vuestra relación perdure por algo más, debéis trabajar con mucho ahínco porque así sea. Tauro tendrá que ser un poco transigente para tolerar tu necesidad de desafíos y aventuras, y agasajarte con numerosos cumplidos, porque a ti te encanta que los que te rodean te adoren e idolatren. Para premiar a Tauro por su abnegada comprensión, no permitirás que pase ni un solo momento aburrido, le obsequiarás con numerosos regalos sorpresa y te mostrarás sumamente orgulloso del Tauro que tienes al lado y de todo lo que es capaz de lograr con su esfuerzo y tenacidad.

-Aries con Géminis. Os sentiréis atraídos el uno por el otro en cuanto os veáis, lo que hará que lleguéis a ser auténticos amigos inseparables, y además, vuestras mentes estarán en un contacto continuo. Pero además de buenos amigos, también conseguiréis ser buenos amantes. Pero competiréis por ver cuál de los dos es más ingenioso, para así averiguar quién puede proporcionar más placer a quién. Podréis llevar una relación maravillosa si consigues controlar un poco tu orgullo y las dudas con respecto a tu Géminis, pues la popularidad del signo de los gemelos te puede producir un poco de inseguridad y celos y ver cosas donde realmente no las hay. Si estás pensando siempre que tu pareja te puede abandonar, quizás sea cuando te abandone. Por eso, intenta desterrar estas ideas de tu mente. Deberás dejar un poquito de lado tu vena autoritaria y permitir que Géminis se expanda a sus anchas cuando asistáis a alguna reunión social, pues no soportará vivir sin seducir a todos los que le rodean con su verborrea, y tú no le dejas ni una parcelita de libertad. Pero no temas porque siempre volverá con su verdadero amor, es decir, contigo.

-Aries con Cáncer. Al principio de vuestra relación, Cáncer intentará hacer todo lo posible para mantenerte contento/a, y eso a ti te encantará. Pero con tanto mimo, al final te volverás impaciente y un poquito egoísta, lo que hará que vuestras personalidades choquen irremediablemente. Pero pese a vuestras diferencias, puede que vuestra unión funcione. Cáncer te ofrecerá en grandes dosis la admiración y el cuidado que tu confianza necesita, porque el cangrejo es lo suficientemente intuitivo como para darse cuenta de tus necesidades. Tú deberás intentar controlar tu impaciencia y ofrecer a Cáncer el tiempo y la seguridad amorosa que necesita. Gracias a esto, vuestra relación se fortalecerá y permitirá a Cáncer revelar su estilo amoroso salvaje e imaginativo. Ambos tenéis distintas motivaciones, diferentes actitudes respecto a la vida, y por supuesto, diferentes metas que cumplir, pero si cada uno de vosotros le cede al otro un poquito de su bondad, vuestra vida por separado, y vuestra relación amorosa, se enriquecerán enormemente.

-Aries con Leo. Si quieres formar parte de un club de fans, lo único que tienes que hacer es enamorarte de un Leo, y es que a los leones les encanta que les admiren. Ambos sois lo bastante fuertes como para dedicaros al otro con la calidez y la suavidad necesaria para que vuestro amor funcione. Leo puede darse cuenta de que detrás de tu caparazón se oculta una persona necesitada de numerosos cuidados, pero que solamente permitirá que se los proporcione alguien a quien verdaderamente admire. Pero a su vez, tú descubrirás que tras las sonrisas y el orgullo de Leo está escondido un ser muy tierno y fiel. Al principio de vuestra relación puede que tengáis más de una pelea, porque os costará decidir quién es el que lleva el timón de vuestra unión. El asunto quedará zanjado cuando tú determines que debe ser Leo el que lleve los pantalones, o al menos que crea que así es. La vuestra será una buena unión, porque además de amantes seréis amigos, e incluso las peleas serán agradables porque os espera una dulce reconciliación.

-Aries con Virgo. Vuestra relación necesitará más de un esfuerzo para que se mantenga. Al principio te puedes asustar al ver la frialdad, meticulosidad y rigidez de Virgo, pero él también se acobardará un poco al observar que tú tienes que llegar el/la primero/a a todo, que no piensas las cosas antes de hacerlas y que vives en un tremendo caos. Pero estas enormes diferencias pueden ser salvadas siempre y cuando tú te muestres bastante paciente y resistas la tentación de arrastrar a Virgo a través de la vida. Virgo tendrá que estar atento a tus críticas para saber reaccionar a tiempo, y además, deberá intentar dejar de lado sus continuas preocupaciones para que no le distraigan del cultivo de vuestra relación sentimental. Gracias a todas estas concesiones tú podrás encontrar ese lado amable que mantienes oculto. Tú tiendes a tener muchos proyectos, pero Virgo se encargará de atar todos los cabos sueltos y los detalles, para que todo concluya a la perfección.

-Aries con Libra. Sois dos signos opuestos de la rueda zodiacal, pero entre vosotros puede surgir algo más que una simple atracción. Tú intentarás exigir todo lo que quieres, mientras que Libra consigue mucho más de ti que tú de él gracias al despliegue de su irresistible encanto. El amor entre vosotros podrá ser algo maravilloso porque los dos estaréis en la misma sintonía, sobre todo, en el tema de la libertad porque ambos la amáis y necesitáis con locura. Aunque con todo lo dicho puede parecer que vuestro romance es la perfección personificada, deberéis tener en cuenta que no es lo mismo tomarse libertad que concederla. Y es que Libra es muy dado a ocuparse de intereses ajenos y a dedicar mucho tiempo a los amigos, lo que hace que tú sufras enormemente y que tengas que controlarte en demasía para no caer en el resentimiento. Si tú eres capaz de controlar tu temperamento, podrás acceder sin dificultades al corazón de Libra, que siempre está buscando el equilibrio. Libra por su parte responderá a tu amor con ingeniosos y sorprendentes juegos amorosos, además de que intentará reducir un poco sus continuas escapadas con los amigos, la mayoría de las ocasiones, por no decir siempre, sin tu compañía.

-Aries con Escorpio. Lo mejor es que te aproximes con la mayor cautela posible al amor de Escorpio porque esta relación se puede convertir para ti en una atracción fatal con tintes sumamente eróticos para ambos. El inquietante misterio que rodea a Escorpio se convertirá para ti en algo irresistible al principio, para poco a poco pasar a ser un desafío. Pero procura no intentar destapar del todo la caja de los secretos de Escorpio porque esto puede hacer que el sarcasmo escorpiano se convierta en un cortante cuchillo para tu excesiva confianza. Tú eres capaz de meterte de lleno en una discusión, decir todo lo que tienes en la cabeza y después zanjar el asunto y olvidarlo. Esto no te ocurrirá con Escorpio pues es de los que quizá perdonan pero no olvidan. Procura controlar un poco tu lengua y tus emociones, aunque a ti puede resultarte francamente difícil.

-Aries con Sagitario. Tú te presentas como el/la candidato/a ideal a un matrimonio feliz y duradero. Ambos os mostráis honestos, quizá demasiado, aventureros, amantes de la libertad y llenos de energía y dinamismo. Una unión que da sus primeros pasos como una interesante mezcla de cuerpos y mentes tan parecidos, puede llegar a ser una verdadera relación basada en la confianza y el amor. Vuestro contacto amoroso comenzará como una aventura, pero no tiene por qué concluir. Hasta incluso las peleas pueden ser un nexo de unión más que de distanciamiento, y es que os creceréis ante la adversidad, llegando a amaros cada vez más, porque sois incapaces de guardar ningún tipo de rencor y resentimiento. Los dos sois signos de fuego, pero Sagitario es mucho más controlador que tú, y por eso será capaz de comprender tu frágil yo interior y protegerlo. El único nubarrón que puede cernirse sobre vuestro porvenir es que tú esperas la máxima lealtad y Sagitario es un poco cabeza loca capaz de dejarse tentar por todo aquel que se le acerca.

-Aries con Capricornio. Seguro que Capricornio estará loquito por tus huesos, pero no se encontrará con la necesidad de decírtelo, ni siquiera de demostrártelo, salvo cuando estéis bajo la pasión de las sábanas. A ti, en cambio, te gusta demostrar tus sentimientos, y esa notable diferencia puede que sea significativa. Además, el tema del dinero también será bastante importante, pues a ti te encanta gastar y a Capricornio ahorrar. Pero estaréis fascinados el uno por el otro gracias a una poderosa atracción sexual, que en un principio podría resultar suficiente para construir los cimientos de vuestra unión, aunque no habrá que engañarse, porque tendréis que hacer más de una concesión por ambas partes. Tú tendrás que procurar mostrarte menos espontáneo/a, sobre todo cuando tengas que tratar de temas monetarios con tu Capricornio. Además, tendrás que darte cuenta que el tiempo que tu pareja pasa trabajando luego ayudará a vuestra mutua seguridad, en vez de tomártelo por la tremenda y enfurecerte.

-Aries con Acuario. Compartiréis casi todo lo que os puede ofrecer la vida: un mar de sueños, unas metas comunes, y una visión del mundo en el que os daréis cuenta de que todo está en él para que vosotros lo exploréis. Seréis unos maravillosos e inseparables compañeros en cuerpo y alma. Seréis capaces de crear en torno a vosotros un mundo en el que tan solo viváis vosotros y en el que podáis hablar de todo de una forma abierta y sincera. Pero no todo va a ser bueno, pues en el amor hay una de cal y otra de arena, y vosotros también tenéis vuestras diferencias. Tú no dudarás ni un momento en lanzarte a nuevas experiencias, mientras que a Acuario lo que le importará es disfrutarlas al máximo. Deberás tener un poco de cuidado con el distanciamiento de tu Acuario porque puede ser capaz de enfriar tu cálida pasión. Ambos tendréis que tener muy claro que dejar un poco de libertad a la persona que tenéis al lado no significa que no la queráis.

-Aries con Piscis. El estilo sexual vigorizado por los poderes psíquicos de Piscis, unido a tu irritación, puede terminar en una relación sexual perfecta, sensual y apaciguadora. Pero las hondas, y en más de una ocasión oscuras emociones de Piscis, no le dejan ni siquiera ver tus fugaces visitas a casa. Todo puede ir viento en popa si contribuyes con tiernas y amorosas palabras a cuidar de Piscis, en vez de solamente tomar todo lo que Piscis aporta a vuestra unión generosamente. Piscis también deberá evitar hacerte falsas promesas, sobre todo, porque tú eres muy confiado y te crees a pies juntillas todo lo que te dice, además de que piensas que todo el mundo es tan honesto como tú. Tendrás que aceptar que el hijo de Neptuno necesita guardar algún que otro secreto, y no frustrarte por el halo de misterio en el que se envuelve Piscis. Si ambos os lo proponéis y os ponéis manos a la obra, los cuidados suaves, hábiles y cariñosos de Piscis te volverán loco/a y te harán caer en las redes del amor.

Breve repaso histórico del ocultismo

Desde siempre, el hombre ha sentido la presencia de fuerzas ocultas a su alrededor, y de fuentes secretas de conocimiento y poderes latentes en su interior. El ocultismo describe las creencias del hombre sobre ese "otro mundo" misterioso y sobre los medios con que ha intentado entrar en contacto con él. Las creencias sobre lo oculto varían de una cultura a otra, cambiando a su vez con el progresar de la ciencia. Pero, aunque esta última explica que la gravedad hace caer la manzana del árbol, no intenta decir por qué ésta golpea precisamente a ese hombre que pasa por debajo. Por su parte, el ocultismo se ha centrado en intentar predecir, prevenir o producir acontecimientos, no en explicarlos.
Para los ocultistas, la dimensión sobrenatural incluye diversos dioses y demonios a los que se atribuía, y a veces se atribuye, una influencia sobre la meteorología, las cosechas y la procreación. Los hombres creían antiguamente que su propia supervivencia dependía de estos poderes. La creencia en la vida después de la muerte, en espíritus y fantasmas era casi universal.
Reconociendo el poder de la sugestión o de la autosugestión, santones como los magi (sacerdotes persas de cuyo nombre procede la palabra magia) inventaron símbolos y rituales para concentrar la mente. Cultos paganos basados en esos rituales sobrevivieron al empuje de grandes religiones, como el cristianismo; pero, desde el s. XIV, las prácticas ocultistas comenzaron a ser condenadas por la Iglesia como diabólicas. La persecución de los albigenses, que sostenían que el mundo material había sido creado por el demonio, llevó a la caza de brujas en Europa y más tarde, en América. Se decía de las brujas que podían tomar la forma que quisieran, volar a la velocidad del rayo en una escoba, convertir a hombres en animales y provocar una infinita variedad de desastres mediante pociones mágicas y encantamientos. La tortura y quema de las supuestas brujas creó un clima de histeria que en realidad fortaleció la brujería y que duró hasta el siglo XVIII.
Proliferaron las historias de gentes que se convertían en lobos (licantropía) y de cadáveres que no se descomponían porque se alimentaban de cuerpos vivos (vampirismo); y se creía en espíritus benignos, como las hadas y los elfos. Se utilizaban oraciones, ritos y talismanes para invocar asistencia o para ahuyentar la mala suerte. Todavía hoy conservamos residuos de supersticiones, como el "tocar madera" y aún se practican exorcismos para sacar los "demonios" de personas supuestamente poseídas.
La predicción del futuro ha sido siempre una preocupación habitual, practicada con los más diversos medios, desde estudiar el firmamento o las entrañas de los animales hasta interpretar formas fortuitas en monedas, cartas, dados o bastoncillos, como en el libro de sabiduría chino I Ching. El vidente europeo más notable fue Nostradamus (1503-1566), médico y astrólogo francés que escribió más de seiscientos oscuros versos que han sido interpretados como la precisa predicción de la Revolución francesa y de otros importantes acontecimientos.
En el siglo XVIII habían caído en desuso métodos de adivinación más extraños y antiguos, como la cefalomancia (crepitación de una cabeza de burro ardiendo), la hidromancia (ruido de una corriente de agua) y la onicomancia (reflejo en las uñas de una muchacha virgen untadas con aceite). Pero aún seguían usándose las cartas del Tarot y muchos otros métodos tradicionales de predicción. Algunos gitanos convirtieron en oficio la interpretación de cartas, sueños, bolas de cristal, hojas de té y palmas de las manos.
A mediados del siglo XIX se avivó el interés por la antigua creencia de que los espíritus de los muertos pueden a veces verse u oírse. La invención de la fotografía dio fuerza a la idea de que los fantasmas eran almas en pena atrapadas entre este mundo y el otro, ya que en la película revelada se apreciaban a veces unas formas fantasmagóricas. Los espiritistas creían que una persona psíquicamente muy sensible, llamada medium, podía alcanzar un estado de trance en el que recibía mensajes de los difuntos.

El movimiento espiritista nació en EE.UU. en 1848, cuando las jóvenes hermanas Fox afirmaron que por toda su casa se oían aldabonazos y que los objetos se caían de los estantes o los tiraba un duende. Más tarde se rechazaron las pruebas de que se habían "comunicado" con ese espíritu, pero surgieron numerosos medium que parecían tener aptitudes paranormales. Entre ellos destacan Helena Blavatsky (1831-1891), fundadora de la Sociedad Teosófica, y Daniel Home (1833-1886), que impresionó a la realeza europea y desconcertó a los escépticos con fenómenos como descensos bruscos de temperatura, mesas flotantes y levitación de su cuerpo.
Se puso de moda organizar sesiones, reuniones para comunicarse con los muertos. Las respuestas a las preguntas de los participantes aparecían escritas en una tabla llamada ouija o bien consistían en síes o noes indicados por el número de golpes o inclinaciones de la mesa. No obstante, el interés por el espiritismo declinó por el predominio de los charlatanes que explotaban la credulidad de los deudos.
En el s. XX, tanto en Oriente como en Occidente, numerosos científicos se interesan cada vez más por la explicación de las fuerzas psíquicas y videntes. Sus estudios permitirán quizás exponer y explicar algunos de estos misteriosos elementos que, según James Jean (1877-1946), hacen que el universo empiece a parecer más una gran idea que una máquina. Las artes adivinatorias que intentaban entrever el destino del hombre por medios ocultistas comprendían la profecía, la geomancia, la astrología, la fisiognomía, la quiromancia y la ciencia de la pirámide.

La "planchette" fue muy usada a finales del s. XIX para producir "escritura automática", supuestamente dictada por espíritus. Así, se ponían las manos sobre una tablilla que podía moverse libremente y que sostenía un lápiz.
La levitación era una de las proezas más sorprendentes que Daniel Home ejecutaba ante un público entendido. Los aparentes poderes ocultos de este medium nunca fueron ni impugnados ni probados totalmente.
La buenaventura tal como se practicaba en China antes de 1545 se basaba normalmente en el uso de monedas o bastoncillos. Jeane Dixon, vidente americana, utilizó una bola de cristal para predecir diversas derrotas y victorias electorales, así como la muerte de Dag Hammarskióld, Marilyn Monroe y John y Robert Kennedy. No hay que olvidarse de la sempiterna y magnífica baraja del tarot donde una vez elegidas y sacadas las cartas según métodos diversos, cada una modera e influye a su vecina. Los buenos intérpretes del Tarot se basan en gran medida en la intuición.
Las fotografías de espíritus mostrados por medium del siglo XIX podían ser fácilmente falsificadas por magos de salón en la mayoría de los casos. Algunos médiums fueron sorprendidos usando ayudantes o diversos métodos mecánicos para producir la ilusión de una sustancia espiritual llamada ectoplasma. Los espíritus han sido más cautos con la posterior fotografía infrarroja tomada en la oscuridad.

La idea del hombre como un microcosmos del universo es una noción griega de la que han derivado numerosas artes ocultas, entre ellas la metoscopia, interpretación de las líneas de la frente o los lunares del cuerpo y donde los caracteres del sujeto se inferían a partir de una serie de círculos, que quizá significaban el reflejo en el hombre de las órbitas "circulares" de los planetas en torno al Sol. Los seguidores de la metoscopia creían que las líneas y lunares eran las estrellas del cuerpo.

La quiromancia, intento de inferir rasgos humanos y de predecir el futuro a partir de las rayas de la palma de la mano, es un arte actual pero que viene de muy antiguo. Durante el s. XV, los principales rasgos de la palma de la mano se relacionaban con los planetas y signos del zodiaco. (Se llama quiromancia en recuerdo de un experto vidente moderno, el conde irlandés Louis Hamon, que se llamaba asimismo "Queiro").

Supersticiones con pan

El pan en forma de eucaristía goza del máximo significado en la religión cristiana y toma su simbología del Beith o casa de piedra, que más tarde se convierte en casa del pan para transformarla en la morada de Dios. Así, desde sus orígenes el pan ha estado asociado a la vida activa y el vino, a la vida contemplativa, por lo que el sacrificio de la misa establece la síntesis perfecta. Por ello tirar el pan, que originariamente constituía un acto desencadenante de las fuerzas del mal, fue progresando convirtiéndose en un acto de irreverencia, casi sacrilegio. En cualquier caso este gesto acarrea desdicha.

Con el pan no hay escapatoria y jugar con él infunde presagios nefastos que expresa irónicamente el refrán: "Con el pan recién cocido, no juegues si no lo has comido".

No ha de comerse el pan que ha mordisqueado otra persona, pues se suscitará su odio, ni arrojar migas a la lumbre, ni engullirlo tostado ya que nacerán parásitos. Se dice también que las tostadas quemadas son el alimento del diablo, por lo que hay que tener buen cuidado con ellas. Tampoco debe colocarse de forma inversa a cómo salió del horno.

Oscuramente, es bueno clavarle alfileres si se quiere provocar un mal a alguien. Al tiempo que se alfiletea debe decirse en voz alta el nombre de la víctima. (Recuerda que al hacerle mal a alguien, tarde o temprano ese mal retornará a ti multiplicado por siete. Tú decides...).

Si antes de cortar el pan no se hace el signo de la cruz sobre él, bien con el pulgar, bien con el cuchillo (y es creencia muy arraigada todavía en zonas rurales de España, por ejemplo), uno se está haciendo acreedor a un castigo, en apariencia arbitrario que puede provenir de la considerada autoridad competente en forma de multa. En el momento en que uno corta el pan no debe permitir que otro lo sujete. Tampoco se puede cortar por los extremos y siempre es mejor valerse de las manos que de un objeto cortante, pues aquel fue el modo en que Cristo lo hizo durante la Última Cena.

Cuando el pan cae al suelo de forma involuntaria, habrá disputas familiares y, en este caso, hay que besarlo o hacer tres cruces sobre el suelo al recogerlo. El pan, junto a la sal, es el primer elemento que hay que depositar en la nueva casa a la que alguien se ha mudado y si queremos proteger a los niños de cualquier instigación o maleficio brujeril, basta con introducirles en su indumentaria o en la cartera del colegio una corteza de pan suficientemente reseca.

Zodíaco Sideral, Tropical y Dracónico

Los tres elementos más importantes y personales de una carta astral son el Ascendente, el Sol y la Luna. En la astrología esotérica se nos dice que representan el futuro, el presente y el pasado, respectivamente. De esta manera, el signo Ascendente indica la meta o propósito de esta vida, aquello que queremos alcanzar, nuestro futuro; el signo del Sol indica los problemas actuales del hombre, aquello que ya alcanzamos, lo que somos, nuestro presente; mientras que el signo de la Luna se refiere al pasado, a la limitación, aquello que arrastramos y que debemos superar, nuestro pasado.

El signo ascendente está activo en nuestra vida si la persona se orienta hacia el futuro, es condicionada por el futuro y actúa para el futuro. Si la controla el signo de la luna, se inclina por el pasado y es estrictamente conservadora.

Cuando nuestros signos solar y lunar son el mismo, significa que no hay conflicto entre nuestro pasado y nuestro presente.

En Occidente vivimos en la cultura del ahora mismo, estamos totalmente enfocados en el presente, nos olvidamos de nuestro pasado y así volvemos a cometer los mismos errores. Y qué pasa con el futuro: pues que ya se apañarán los que vengan detrás, yo solamente me preocupo por mí.

Con esta manera de vivir es normal que nos interese principalmente el signo del Sol. Así tomamos al Sol como referencia para nuestro zodíaco y situamos el origen en el equinoccio de primavera o punto vernal que corresponde al punto ascendente de la eclíptica que corta al ecuador celeste; el Sol en su movimiento aparente pasa del hemisferio sur al norte. Hablamos, por tanto, del zodíaco tropical.

En la carta tropical, el Sol es el elemento más importante, habla de nuestra esencia.

En Oriente, en cambio, se cree en la reencarnación, no viven enfocados en el presente. Toda su vida está encaminada en quemar su karma del pasado para en el futuro tener una vida mejor. De esta manera, lo normal por tanto es que se interesen más por el signo del Ascendente y de la Luna, y no tanto por el Solar. Así, en Oriente se utiliza el zodíaco sideral y sitúan el origen entre las constelaciones de Piscis y Aries. El Ascendente es la constelación que pasa del hemisferio sur al norte. Los nodos lunares también son muy importantes en la astrología oriental ya que hablan de pasado y futuro.

Por último, podríamos hablar del tercer zodíaco denominado dracónico ya que toma como origen del zodíaco el nodo norte de la Luna, punto ascendente de la órbita lunar en donde pasa del hemisferio sur al norte. Este zodíaco es muy poco utilizado, se dice que es muy importante en los primeros años de nuestra vida.

Así, como hemos podido ver, tenemos:

-Zodíaco Sideral / el Ascendente / el Futuro.
-Zodíaco Tropical / el Sol / el Presente.

-Zodíaco Dracónico / la Luna / el Pasado.

En esoterismo se hablaría de los tres niveles del ser humano: Alma (Ascendente), Personalidad (Sol) y Cuerpo (Luna).

Y ahora, según la preferencia de cada persona, le servirá uno u otro zodíaco, pero teniendo presente que cada zodíaco nos habla de aspectos (futuro, presente, pasado) y niveles (alma, personalidad, cuerpo) diferentes del ser humano. E incluso, dentro de cada zodíaco está representada a su manera esta triple diferenciación.